A partir de la década de los años 60 España encamina su ruta hacia el turismo, creciendo paulatinamente, aprovechando las bondades de su paisaje natural.
El turismo “Sol y playa” es el preferido por los vacacionistas, llegando a ser el segundo país en cantidad de turistas y también en gasto. Uno de los países más competitivos del mundo, y va en vías de un turismo sostenible.
Es momento de analizar si es posible que el modelo turístico tradicional se mantenga y que realmente cubra los requerimientos de los turistas actuales. Así como también, si es el modelo más adecuado para mantener los recursos naturales.
La transformación del turismo debe enfocarse hacia la sostenibilidad, lo cual está contemplado en el desarrollo sostenible de la agenda 2030. En este sentido, la Secretaria de Estado de Turismo de España, trabaja en la transformación del turismo hacia ese sentido. En buscar la sostenibilidad tanto económica, como social y por supuesto del medio ambiente.
Ya que es la única manera de crecer y mantener el turismo y disminuir el impacto ambiental. Pues al deteriorarse el medio ambiente, no hay probabilidad de turismo alguno.
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Las directrices del turismo de España
En España, las directrices del turismo proponen un modelo de desarrollo donde prevalezcan calidad del servicio y la adaptación tecnológica.
Y que a la vez, sea un turismo amigable con el ambiente y preserve los recursos naturales y la cultura del lugar. Finalmente debe ser un turismo que permita que los beneficios sean repartidos equitativamente así como las cargas del turismo.
Siendo un país líder en turismo a nivel mundial, es ineludible continuar siendo competitivo y seguir apoyando al sector turístico. Y en definitiva comprometerse en lograr los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030.
Ser líder en turismo implicó cerrar el año 2018 con la visita de 82,6 millones de visitantes internacionales. Lo que registró un aumento del 0,9% respecto al año anterior. Asimismo, la actividad reportó un 3,1% más de ingresos que el año anterior, hasta alcanzar 89.678 millones de euros. Un nuevo record tanto en turistas internacionales como en gasto público.
Es así como el turismo es un sector que genera ingresos y empleo para muchos sectores en España. Los ingresos en el 2017 fueron de 137.020 millones de euros, un 11,7% del PIB.
Así mismo, la demanda interna de turismo también va en aumento. Los españoles realizaron 176,4 millones de viajes dentro de España, en 2017. Lo que representó el 81,1% del total de viajes realizados por los españoles. Este porcentaje representa un aumento respecto al año anterior del 6,13%. Asimismo, durante los primeros 6 meses del 2018 los viajes en España aumentaron un 1,4%.
El compromiso de España con los ODS 2030, la llevó a ser electa para trabajar junto a Francia, en el programa “One Planet Sustainable Tourism”. Estos dos países buscarán desarrollar el turismo reduciendo su impacto a los recursos naturales.
Por lo tanto se enfocarán en promover su crecimiento y amplificar las prácticas sostenibles de consumo. De manera, que se logre un uso más eficiente de los recursos sin deteriorarlos. Tal como lo espera la Organización Mundial de Turismo (UNWTO)
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La ciudadanía despierta ante el tradicional “modelo turístico español”
Los síntomas de debilitamiento del modelo turístico tradicional en España son evidentes. Hasta el 2017, el turismo era en demasía dinámico batiendo récords de visitas internacionales de turistas. Es uno de los motores de la economía en España, sin embargo se presenta actualmente debilitado.
Algunas de las razones es la reactivación del turismo en otros países como Egipto y Túnez, grandes competidores del mediterráneo. Así como también el poco crecimiento de los principales países emisores de turistas y de la demanda nacional.
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Los ciudadanos españoles, por primera vez, se organizan y reclaman el derecho de vivir libres, sin la saturación que genera el turismo masivo en museos, parques y demás espacios públicos.
Las viviendas y apartamentos convertidos en hospedajes turísticos también son causa de malestar y rechazo al turismo. Ya que ello trae como consecuencia el aumento de los alquileres. Lo que ocasiona que los de menos poder económico salgan de los centros de las ciudades. Inclusive de barrios no tan céntricos donde también llegan los vacacionistas.
La población tiene claro que desarrollo de turismo sostenible significa mantenerse en el tiempo pero de ahí a lo que hay que hacer para lograrlo hay mucho trecho. Es necesario avanzar y definir donde actuar y como para mantener la actividad turística a largo plazo sin dañar el ambiente. Analizar las fallas de la calidad del turismo y qué aspectos fortalecer para un futuro más competitivo en especial con países del mediterráneo.
Un sistema de indicadores que permita gestionar los impactos en forma adecuada es una línea de acción adecuada, tal como lo manifestó la OMT en 2017. Sin dejar de lado la gobernanza política, la cual debe tener muy en cuenta que el cambio climático exige actuaciones urgentes para frenarlo.
Según la Organización Mundial del Turismo La cantidad de 1.200 millones de turistas que se movilizan por el mundo dependiendo de cómo se maneje, son una oportunidad o un problema. Y en ello tiene mucho que ver las políticas del sector.
El objetivo final es que las futuras generaciones cubran sus necesidades y para ello es necesario mejorar el modelo. De esta forma, se mantendrá el turismo como una importante actividad sostenible para la economía española.
Ya que las actividades turísticas son generadoras de empleos, creando alrededor de 100 mil nuevos empleos, lo que sin duda fortalece la economía en España.
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